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¿Por qué el primer milagro de Jesús fue convertir el agua en vino?

by vinnymoy
Las bodas de Caná. Paolo Veronese (1563). Milagro de la conversión de agua en vino.

No sé si a todos los que han escuchado alguna vez que el primer milagro de Jesús fue convertir el agua en vino les haya podido llamar la atención, a mi sí. Durante años (antes de convertirme en cervecero) leía esto y francamente no me parecía muy coherente, sino más bien algo fuera de momento y lugar, quizás esperaba que el primer milagro fuera algo «más poderoso y sublime». Sin embargo, en textos religiosos nunca hallé la respuesta que sí encontraría, años después, al leer sobre la historia de las bebidas fermentadas, y es por eso que escribo este artículo.

El descubrimiento de la fermentación alcohólica

No podemos entender el tema que estamos tratando sin primero saber que hubo un antes y un después en el proceso de fermentación, ese fue el día en el que un holandés llamado Anton van Leeuwenhoek fue el primero en poner una gota de cerveza bajo un microscopio (alrededor de 1680) y observar que se encontraban microorganismos, aunque realmente no sabía muy bien qué es lo que estaba observando. Vendrán luego una serie de trabajos independientes alrededor de 1837, en donde De La Tour en el país galo y Schwann en lo que hoy sería Alemania determinaron que el proceso de fermentación se producía por la presencia de microorganismos vivos, en detrimento de la anterior teoría de la generación espontánea. Cuestión que llegó a la cúspide cuando el francés Louis Pasteur explicó en 1857 cómo sucedía la fermentación.

¿Y antes de esto cómo pensaban que aparecían las bebidas alcohólicas? Pues creían que era de origen divino.

La larga lista de dioses del vino, la cerveza y las fiestas.

¿Acaso creías que es casualidad que todas, o casi todas, las culturas antiguas tenían una o varias deidades relacionadas a las bebidas alcohólicas? Sólo piénsalo: Abundancia, Acantos, Acratopotes, Aegir, Aizen Myō-ō, Amphictyonis, Baco, Ba-Maguje, Bes, Biersal, Ceraon, Colhuantzíncatl, Cuatlapanqui, Dioniso, Enotropeas, Inari, Liber Pater, Macuiltochtli, Maeve, Mete, Ninkasi, Mbaba Mwana Waresa, Oggun, Ometochtli, Osiris, Pahtécatl, Papáztac, Siduri, Sileno, Siris, Sucellos, Teatlahuiani, Tenenet, Tepoztécatl, Tequechmecaniani, Tezcatzóncatl, Tlaltecayohua, Tlilhua, Toltécatl, Tomiyauh, Yauhtécatl. Griegos, romanos, mayas, vikingos, gaélicos, aztecas, zulúes, egipcios, babilonios, asirios, y un gran etc, etc, y etc. Pero, ¿por qué?

Vamos a ver. Detente un segundo y ponte en los pies de un tipo del siglo X antes de Cristo en el Antiguo Egipto; mezclas unos granos con agua, los pones en una tinaja al sol, y listo, unos días después tienes una bebida con un bajo, pero presente, contenido alcohólico. ¿No es acaso obvio que acredites a la divinidad este milagro?

Por esta razón, antes del descubrimiento de la fermentación alcohólica, era tarea exclusiva de los dioses transformar el agua en alcohol.

El milagro de Jesús dice: «Yo soy Dios»

Pongámonos en contexto. Estás en la provincia de Judea, en el Imperio Romano, y Jesús tiene la oportunidad de por primera vez revelar su identidad, no lo quiere hacer aún, sin embargo lo hace mediante un peculiar evento:

Al tercer día se hicieron unas bodas en Caná de Galilea; y estaba allí la madre de Jesús. Y fueron también invitados a las bodas Jesús y sus discípulos. Y faltando el vino, la madre de Jesús le dijo: No tienen vino. Jesús le dijo: ¿Qué tienes conmigo, mujer? Aún no ha venido mi horaSu madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere. Y estaban allí seis tinajas de piedra para agua, conforme al rito de la purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían dos o tres cántaros. Jesús les dijo: Llenad estas tinajas de agua. Y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo: Sacad ahora, y llevadlo al maestresala. Y se lo llevaron. Cuando el maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo, 10 y le dijo: Todo hombre sirve primero el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el inferior; mas tú has reservado el buen vino hasta ahora. 11 Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, y manifestó su gloria; y sus discípulos creyeron en él.

Evangelio de Juan, capítulo 2.
Le Nozze di Cana. Capilla de los Scrovegni (Padua). Giotto di Bondone (1303-1305). Milagro de Jesús convirtiendo el agua en vino.
Le Nozze di Cana. Capilla de los Scrovegni (Padua). Giotto di Bondone (1303-1305).

De agua a vino

Jesús, al realizar este milagro, en la cabeza de alguien de aquel siglo estaba diciendo: «¡Soy yo quién convierte el agua en vino! ergo ¡soy yo quien es Dios!».

Desde una perspectiva cristiana este evento per se pasa desapercibido, dándosele mucha más importancia a la asistencia a la boda, la personalidad de Jesús, sus declaraciones, la petición de María (particularmente en el catolicismo) y otras cosas más, pero entendamos a los discípulos, quienes al ver este milagro, como dice Juan, ellos «creyeron en él».

Finalmente, si partimos de este hilo de ideas, entenderás ahora el porqué el vino está presente a lo largo de toda la biblia como un elemento central del culto y la representación de Dios. También, el porqué fue adoptado por los primeros cristianos y se mantendría durante siglos, llevando a que sean monjes católicos de distintas denominaciones quienes eran los dueños y administradores de muchas cervecerías, de ahí que se nombren con nombres religiosos: Paulaner (Francisco de Paula), Benediktiner, Franziskaner, entre tantas otras.

At the Monastery. Eduard von Grützner
At the Monastery. Eduard von Grützner

Dicho todo esto, ¿hay alguna curiosidad que desees agregar? Te invitamos también a visitar nuestra entrada sobre Fray Jodoco y la primera cerveza de Sudamérica.


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