Después de una visita al conocido Bar Chinaski en Lavapiés, Madrid, y a posteriori de una cata de cervezas artesanales, nos hemos topado con una sorpresa de la que no podemos ignorar sus peculiaridades y que nos ha llamado la atención en demasía: la Flamingocillus de la cervecería Bonvivant de Málaga.
Una IPA va, una Brut IPA viene, cuando de repente ha llamado nuestra atención una cerveza que, a primera vista, parecía más bien un batido de fresas. He de decir y reconocer que la primera impresión no fue la mejor, pero no podíamos pasar la oportunidad de probar dicha bebida. Con cautela observamos la pancarta descriptiva de lo que se ofrecía en dicho momento. Bonvivant – Flamingocillus – Berliner Weisse con frutos Rojos, rezaba el cartel. Origen: Andalucía. Es en ese momento en que fue definitivo, “denos una” clamamos al camarero que sin tardar nos la ofreció.
La cerveza:
En aroma definitivamente se percibían los frutos rojos, mango, cítricos, pero en realidad fue en boca la sorpresa. A veces hay estilos que uno sabe de antemano son complejos de elaborar, y la Berliner Weisse es uno de ellos, mas la Flamingocillus había pasado la prueba. La acidez muy correcta, los aromas y sabores bien integrados entre el estilo y la adición de frutos rojos que sabemos no son fáciles de manejar. Pomelo, mango, piña.
Finalmente para completar un par datos técnicos de aquellos que a todos nos gusta, la Flamingocillus es elaborada con Lactobacillus plantarum de Lallemand Brewing (aunque no sabemos con certeza que sea este género, es lo más probable debido a que es el producto comercial que conocemos vende Lallemand). Tiene 4.0 grados de alcohol, y no hemos encontrado datos certeros del nivel de amargor.
Otra cosa que no podemos dejar de comentar es la muy bonita etiqueta que muestra esta botella.
La cervecería:
Por esta razón hemos querido averiguar más sobre quiénes son los cerveceros que elaboran la Flamingocillus, y hemos encontrado que esta cerveza viene de Bonvivant, una cervecería Malagueña, que a juzgar por las fotos cuenta también con un Tap Room, en el que ofrecen sus cervezas muy frescas y algo de comer. Es importante mencionar que Nacho Gabrielli, su maestro cervecero, es un antiguo alumno de los Cursos de Cervecería de la Universidad de Alicante.
(Te invitamos a leer este post sobre nuestra opinión acerca de este tipo de ofertas de formación: Hay que aprender de quien sabe hacer).
Y aunque no hemos encontrado mucha más información sobre ellos nos queda claro que la próxima vez que visitemos Málaga será una parada obligatoria en nuestro itinerario.
Nuestra recomendación:
Definitivamente es una cerveza para buscarla y para probarla, una agradable novedad que valió la pena degustar. Eso sí, no olvides que las Sour no son para todos los gustos, pero para los que las disfrutamos, lo hacemos en grande.
¡Salud!